Abadia Retuerta: Un Nuevo Clásico
Cuando pensamos en los clásicos, pensamos en: CUNE Imperial, Jean Leon Cabernet Sauvignon Reserva, Protos Reserva, etc. (todos vinos excelentes, por cierto), pero creo que hay unos cuantos vinos que podríamos considerar como los nuevos clásicos, entre ellos: Arzuaga, Luis Cañas Reserva, Pago de Carraovejas y cómo no, Abadia Retuerta Selección Especial.
Para variar, la otra noche en una cena de amigos tuve que elegir los vinos de la carta. Era una decisión comprometida porque la carta de vinos, aunque era extensa, tenía todo vinos muy clásicos con pocas novedades o curiosidades. Elegi Abadia Retuerta Selección Especial (Sardon del Duero, Valladolid) porque hace mucho que no lo había tomado y siempre me había parecido un gran vino. Sigue siendo un vino delicioso, es todo un nuevo clásico.
Con una gran intensidad de color de Picota oscuro saturado. Tiene una nariz compleja y atractiva, con multitud de aromas florales, bien ensamblados ya con la madera que aporta notas de torrefacción y caramelo. Tiene una entrada en boca suave y amable que da paso a un vino de gran riqueza aromática e increíble expresividad. Buen equilibrio entre alcohol, acidez y estructura con taninos de gran calidad muy finos y suaves. Muy persistente en boca, sigues saboreando del vino mucho después de tragarlo.
Abadia Retuerta también hacen Rivola, un vino tinto más económico de un fantástico calidad por su precio. Es un vino de color rojo picota intenso. Con un aroma tostado con notas de clavo, regaliz y café. Tiene un ligero gusto avainillado (de su tiempo en barricas nuevas). El ataque es tierno, con estructura y taninos fundidos. En boca se aprecian recuerdos de frutas rojas y torrefacción.
Además de vinos, Abadia Retuerta tienen un hotel y spa en medio de sus pagos que lo llaman Le Domaine.
“Le Domaine surge como una gema de piedra engarzada en un mar de vides. Este hotel de cinco estrellas ha logrado combinar el estilo medieval y el equilibrio ecológico con todas las comodidades del siglo XXI.
La transformación de la abadía en hotel ha exigido una meticulosa restauración que ha respetado al máximo el edificio histórico, y sus antiguos usos, y ha logrado rescatar valiosos elementos artísticos como los frescos de la iglesia y el refectorio.”
