La Importancia de Una Buena Copa
No hay nada peor que tener que tomar un buen vino en una copa no adecuada para el vino, maloliente o con manchas. A todos nos ha pasado por lo menos una vez que hemos ido a casa de unos amigos y no tienen unos buenos recipientes para el rico vino que hemos traído. Tenemos que beber un vino reserva en unas copitas pequeñas o peor aún, vasos chatos. Como muchos, me hace gracia beber un tinto jóven de un vaso chato en un bar de tapas, pero en casa ó en un restaurante, no please.
¿Y por qué no? No es por mera elegancia o ser un esnob, no, las copas de vino necesitan un pie para que el vino no se caliente con las manos. Esto es sabido por todos que han recibido formación de hostelería y gastronomía.
Si queréis saber realmente todo sobre el diseño de las copas de vino en relación con el vino que contienen, solo tenéis que mirar la página web de Riedel. Un fabricante austriaco de copas de vino específicos para cada varietal. He escogido un texto de su página web que creo que lo resume todo muy bien.
“En la historia que se remonta a tantos años del vidrio, Claus Riedel fue el primero que diseñó su forma adaptándola a las características del vino. Es, por lo tanto, el inventor de la copa de vino funcional.
Para plantear la vida de forma positiva, hay que vincularla al placer y disfrute. Nuestros sentidos como la vista, oído, tacto, olor y gusto proporcionan el placer. La experiencia nos muestra como los fabricantes utilizan un material tan versátil como el vidrio para crear un “deseo de vivir”.”
¿A que a nadie le extraña ver a alguien en una terraza tomandose un gin tonic en una copa espectacular hoy en día? La copa espectacular hace que el gin tonic tenga mejor imagen, apetece más y el consumidor disfruta más, tiene más placer. El cocktail podría ser de un Beefeater sencilla con Schweppes de toda la vida (no tengo nada en contra por cierto), pero en esa copa, con buenos hielos y un poquito de atención por parte del camarero a la hora de servirlo, todo se vuelve mejor. Lo mismo es verdad con el vino. Más de una vez he pedido el vino más barato de la carta en un restaurante elegante y por ponerlo en una buena copa en ese lugar elegante, etc. ese vino me sabe mejor que nunca.
Todo restaurante debería recordar que “nuestros sentidos como la vista, oído, tacto, olor y gusto proporcionan el placer” y el vino, por muy bueno que sea, si esta servido en una taza de barro con olor a detergente o a humedad no proporciona mucho placer.
Ahora mismo tenéis una oferta en Tomevinos de 6 botellas de Celeste Roble de Torres con 6 buenas copas de vino por tan solo 33€!
