Adivina, adivinanza. Un juego en el que todos los participantes tienen que ser adultos, pueden ir en parejas o en grupo, es recomendable vendar los ojos, cobran vital importancia los sentidos del olfato y el gusto y todos ganan porque todos disfrutan. Vamos, en mi casa, el jueguecito por antonomasia. Sí, efectivamente, hablo de una cata ciega.

Instrucciones:

– elegir vinos con características muy distintas

– descorchar y descapsular las botellas

– envolver las botellas con papel de aluminio o papel de charol (opaco) para ocultar las etiquetas. También se pueden vendar los ojos de los participantes. Esto hace más complicado reconocer el color y la crianza del vino pero otorga un carácter algo más depravado al juego.

– enumerar las botellas

– rellenar una ficha para describir y puntuar los distintos vinos enumerados. Se puede rellenar una ficha en blanco (para iniciados) o bien una ficha que contenga los nombres de los distintos vinos a catar y sólo haya que apuntar el número de botella que le corresponde (para principiantes o jugadores que se frustran fácilmente)

– probar con atención e intención, y sin ningún tipo de mesura, cada una de las botellas.

– una vez rellenadas las fichas, destapar las botellas y comparar los resultados.

 

Sugerencias de sesiones tintas:

–          Por tipo de uva: se eligen sólo vinos monovarietales (garnacha, cabernet sauvignon, cabernet franc, tempranillo, syrah, bobal, mencía, merlot, monastrell…). Ejemplos de cada: Jardín de Lúculo, Doña Victorina, Pétrola, Azpilicueta, Príncipe de Viana, Corolilla, Gaba do Xil, Finca Collado, Juan Gil).

–          Por denominación: se eligen zonas muy distintas (Rioja, Toro, Priorato, Bierzo, Somontano, Mancha, Ribera del Duero…). Ejemplos: Hacienda López de Haro, Románico, Camins, Losada, 12 Lunas, Museo merlot, Torremorón)

–          Por tipo de crianza: lo importante es poder detectar la madera (maceración carbónica, joven, roble, crianza, reserva, gran reserva…). Ejemplos: Murmurón, Joan d’Anguera, Recoletas, Carramimbre, Matsu Viejo, 904.

–          Por nombre: aquí se busca ver la asociación de ideas en las mentes de los participantes y la ficha debe ir prerrellena. Ejemplos: Habla del Silencio, Cuatro Pasos, La Malkerida, Garnacha Salvaje del Moncayo, Seis al revés, Supernova, Pícaro.

 

Las sesiones tintas son las más populares pero igualmente se puede jugar sesiones de blancos, rosados y espumosos. Es muy divertida también hacerlo por países (amplía mucho el espectro de uvas), por graduación alcohólica (menudas sorpresas se lleva uno) o por precio (se juega a adivinar el precio y algún vino caro suele quedar como mediocre y al revés).

 

NOTA: lo ideal sería tener preparado algún tipo de premio para el ganador. Y, por qué no, un castigo vergonzante al perdedor. Esto estimula aún más si cabe la competitividad… y los sentidos. Disfruten.